Minas Tirith: Ciudad de Reyes

miércoles, 12 de octubre de 2011

Festividades en Qualinost: el Kentommen de Porthios


Hoy es día festivo, y lo recibimos con enorme alegría; vosotros, porque a estas horas estaríamos en clase, y estoy convencido que todos y todas ganáis con el cambio; y yo, que no es que no os eche de menos – XD -, por poder dedicarle un rato al blog.
Hablemos, pues, de festividades. La de hoy es nuestro Día de la Hispanidad, cuyo nombre oficial, más solemne, es nada menos que Fiesta Nacional de España. Como podrán observar los curiosos en la Wiki, es una festividad con casi un siglo de historia que conmemora el descubrimiento de América a finales del siglo XV. Se celebra, además, el día de las Fuerzas Armadas, que desfilaban hace un rato por las calles de Madrid.
Como suele ser mi costumbre, aunque hablemos de FESTIVIDADES, las mías van a ser algo más extrañas que las que suelen procurarnos días de fiesta como este. En concreto, os voy a hablar de dos Fiestas de Mayoría de edad, las que celebran los Elfos Qualinesti y los Enanos de las Colinas en un volumen de la saga Dragonlance titulado Qualinost. Este libro fue escrito por Mark Anthony – nada que ver con el cantante, lo he comprobado – y Ellen Porath, y lo publicó Timun Mas en el año 1998. Recientemente lo vi en alguna colección por fascículos de Altaya, así que no es difícil encontrarlo si os llama la atención.
Las Fiestas de Mayoría de Edad son constantes culturales que muchas veces se han dibujado e imaginado con brillantez en obras fantásticas como Qualinost. El tránsito de los niños o jóvenes adolescentes a la condición adulta es motivo de regocijo y celebración. Además de la fiesta por el ilusionante cambio de etapa, se erige en un acto de buenos deseos y ánimos ante la aventura, muchas veces dolorosa y difícil, de la vida adulta.
En la realidad, suele establecerse una edad en la que se os considera ya adultos, a pesar de que algunas personas maduran muchísimo antes de llegar a esos años y otros muchos siguen comportándose como críos muy pasada esa frontera. En la mayor parte de países se alcanza la mayoría de edad a los 18 años. Los más jóvenes del mundo en ser considerados adultos son los albaneses, los habitantes de Samoa Americana y los varones de la isla de Man – ojo con los chistes fáciles –, en Reino Unido: todos ellos son mayores de edad con 14 añitos recién cumplidos. Os imagino a los de Segundo de ESO siendo mayores de edad... Estremecedor. En el otro extremo, los más tardíos en conceder la condición adulta a sus ciudadanos son un grupo de países que espera hasta los 21 años: en esa lista figuran irlandeses, egipcios, cameruneses y los habitantes de Misisipi, en el Sur de Estados Unidos.

En el libro de Qualinost, se nos cuenta que los Elfos Qualinesti abandonan la adolescencia y pasan a ser considerados adultos a los 99 años. No debe extrañaros, ya que viven más de tres o cuatro siglos. Los elfos nobles y adinerados celebran solemnemente la entrada a la vida adulta de uno de los suyos, en una ceremonia ancestral, cuyos orígenes se remontan a Kith-Kanan, llamada Kentommen. En la novela, la pareja de amigos protagonistas, el enano Flint Fireforge y el joven Tanis el Semielfo, asistirán a la celebración de un Kentommen memorable: el de Porthios Kanan, hijo mayor del Orador de los Soles reinante y heredero al trono. En el capítulo 24, “Una muerte”, en la página 289 de mi edición, el mago Miral le explica con detalle cuál es el proceder de la celebración. Miral emplea una estructura EXPOSITIVA, didáctica y sencilla para explicárselo a Flint, forastero y por tanto ignorante de las costumbres de Qualinost. Es ordenado, emplea frases sencillas y unívocas (sin posibilidad de confusión), ofrece traducciones y sinónimos. Así deben ser vuestros textos cuando queráis explicar algo:

La palabra “Kentommen” o “mayoría de edad” hace referencia a la última de las cuatro etapas de que consta la ceremonia. Es la parte más llamativa, la que querría presenciar más gente.
La primera etapa se llama Kaltatha, o “el Retiro”. […] El joven, que puede ser varón o hembra, siempre que se trate de un miembro de la nobleza, es conducido por sus padres a la Arboleda. En el desfile hacia la Arboleda, toda la ciudad se engalana y los elfos corrientes aprovechan para bailar y danzar por las calles luciendo sus mejores atuendos y joyas. [...]
Durante el retiro, Porthios permanecerá en la Arboleda durante tres días, a solas, sin comer nada y bebiendo solo el agua del manantial que hay en el centro del bosque. […] Allí se purificará y se despojará de todos los atributos de la adolescencia. La última mañana, se bañará en el manantial, del que emergerá limpio de cuerpo y alma. […]
Ya en el palacio, los nobles enmascarados permanecerán de pie formando un triángulo alrededor del joven – explicó Miral -. Son los Ulathi, los “Vigilantes”, y cada uno de ellos tiene un nombre ceremonial: Tolethra, o “Ambición”; Sestari, o “Envidia”, y Kethyar, u “Orgullo”. Los tres acosan al joven de manera implacable, acusándolo de ambición egoísta, de ocultar la grandeza de otros y de vana soberbia. […] Su finalidad es descubrir si queda alguna sombra en el corazón del joven. En caso afirmativo, las crueles pullas de los Ulathi le provocarán el miedo, la ira o el desaliento. Gritar, llorar, e incluso titubear significa fracasar en la prueba, y el joven sería considerado un niño para siempre.
Si consigue mantenerse hasta el final sereno y en paz consigo mismo, los Ulathi se limitarán a asentir en silencio y saldrán del cuarto, dejando abierta la puerta.
Tras su éxito, el joven se levantará como Elfo adulto y se iniciarán exultantes celebraciones en toda Qualinost durante tres días: bailes, música, desfiles, lluvias de flores, espectáculos, mercadillos y grandes banquetes.”

Mark Anthony y Ellen Porath. Qualinost. Traducción de Mila López. Timun Mas, 1998. Páginas 289 – 290.

Frente a esa complicadísima, ceremonial y reverente entrada en la Mayoría de Edad de los aristócratas de Qualinost, Flint se limita a resoplar, y comenta como celebraban los Enanos de las Colinas la entrada en la vida adulta:

Nuestra celebración se llama Día de Barba Cerrada; consistió principalmente en reunirnos todos los habitantes del pueblo, hacerme un montón de regalos y beber cantidades ingentes de alcohol y aguardiente.”


Distintas celebraciones, pero siempre tintadas de alegría; como la nuestra, en este día festivo. Echadle un vistazo a este primer volumen de los Compañeros de la Dragonlance, en la que se narra el inicio de la amistad entre Tanis y Flint, se traza magistralmente la vida en la mítica capital élfica, donde el Enano es el único extranjero, y donde sus múltiples maravillas – desde la alucinante Torre del Sol, sede del trono del Orador, a la belleza incomparable de la jovencísima Laurana, su hija mayor – no pueden ocultar terribles peligros, personajes malvados, odiosos, cobardes y traidores, y oscuras conspiraciones en torno, precisamente, al Kentommen de Porthios. Nada debería estropear una buena festividad. Seguid disfrutando de la vuestra, y ojalá alguno se anime con Qualinost. Lo disfrutaréis. Os veo en clase, salud.