Minas Tirith: Ciudad de Reyes

sábado, 8 de mayo de 2010

Diccionarios y Enciclopedias en el Oikumene

Uno de los aspectos que más me agradaron en la serie Los príncipes Demonio de Jack Vance fueron las citas que abrían cada episodio. Vance inventa todo un “corpus” imaginario de libros escritos a los largo y ancho del Oikumene. Toda la información nos llega por fragmentos de los libros supuestamente escritos en ese mundo, aunque también de transcripciones de mensajes radiados, programas televisivos, mitins políticos o clases universitarias. Como Borges, Vance idea toda una suerte de metareferencias a las que acude en el umbral de los capítulos, dando mayor entidad al universo que recrea. Gracias a ellos sabemos que hay un gobierno universal llamado Oikumene, aunque sin un gobierno central, inasumible por el descomunal tamaño del los dominios del Hombre, que inició la colonización del espacio un milenio y medio atrás; los mundos fuera de su ámbito (que no son pocos) son llamados el Más Allá y son considerados una área fuera de la ley y por lo tanto peligrosa. Existe un medio universal de transporte interestelar llamado Interfisión Jarnell, pero como suele suceder en las obras de Vance la  especulación científica no es un recurso necesario (a ojos de los fans irredentos del maestro Asimov, ésta es sin duda la mayor carencia de Vance). Se ha establecido un cuerpo de policía común, la PCI (Policía Coordinada Interplanetaria) que hace labores de espionaje en el Más Allá, mediante los agentes llamados “comadrejas”; e irónicamente ello ha creado la única organización de ese lado de la galaxia: el cuerpo anticomadrejas. Hay una moneda universal llamada UCL (Unidad de Curso Legal) que supuestamente es infalsificable, etc.

Todo ello, os decía, lo conocemos a través de citas de toda índole. Como tenemos que repasar la clasificación de los DICCIONARIOS y el concepto de DEFINICIÓN, emplearemos dos citas extraídas de esta saga.
En la primera, encontramos una ENTRADA del Diccionario Ideológico de la Vieja Tierra. Refrescaremos los distintos tipos de DICCIONARIOS que conocemos:

DICCIONARIOS DE LENGUA: En ellos se explica brevemente el significado de las palabras de una lengua determinada. Para la lengua española quizá el referente más común sea el DRAE, o Diccionario de la Real Academia Española, elaborado conjuntamente por las veintidós Academias de la Asociación de Academias de la lengua Española.



En la novela de Vance, se introduce de esta forma la entrada Erdenfreude. A pesar de la reminiscencia germánica del término, leed esta definición y dejaos llevar por lo hermoso del concepto, lógicamente desconocido para nosotros, que crea el autor:

Erdenfreude. sust. f. Misteriosa e íntima emoción que dilata los vasos sanguíneos, electriza los nervios subcutáneos y provoca vahidos de temor, es uno de los típicos síntomas que afectan a los hombres del espacio cuando se aproximan a la Tierra. Sólo son inmunes los insensibles o los indiferentes. Se han producido casos de palpitaciones casi fatales.
El origen de la Erdenfreude está a día de hoy en medio de un enconado y polémico debate. Los neurólogos describen el cuadro como un ajuste anticipado del organismo a la absoluta normalidad del conjunto sensitivo: reconocimiento de los colores, percepción sónica, fuerza de coriolis y equilibrio gravitacional. Para los psicólogos, por el contrario, la Erdenfreude es el flujo de un millar de memorias raciales que pugnan por hacerse conscientes. Los geneticistas hablan del RNA; los metafísicos se refieren al alma; los parapsicólogos plantean la poco plausible observación de que las casas encantadas solo existen en la Vieja Tierra.



DICCIONARIOS ETIMOLÓGICOS: nos indican el ORIGEN de la palabra y el momento, de ser conocido, en que es asumida en la lengua. El más célebre de la lengua española es el clásico Tesaurus, sin olvidar el monumental Diccionario crítico etimológico castellano e hispánico de Joan Corominas. Respirad tranquilos, no deberéis trabajarlo en la E.S.O.

DICCIONARIOS BILINGÜES: Ofrecen la traducción de un término de una lengua a otra y su breve glosa, acompañada normalmente de sinónimos o términos cercanos. Como ejemplo válido podríamos contemplar cualquier Spanish – English de la prestigiosa editorial británica Oxford.

DICCIONARIOS DE SINÓNIMOS Y ANTÓNIMOS: En estos diccionarios se relacionan palabras de significado similar y opuesto, para facilitar la elección de éstas al redactar textos.

DICCIONARIOS ESPECÍFICO-TÉCNICOS
: Se trata de diccionarios que están dedicados a palabras o términos que pertenecen a un campo o técnica determinados como, por ejemplo, la informática, la jardinería, la ingeniería, la computación, la genética, la heráldica, el lenguaje SMS, la arquitectura, la filosofía, pesos y medidas o abreviaturas, términos militares, de moda, etc. Proporcionan breve información sobre el significado de tales palabras o términos.

DICCIONARIOS DE USO
: Orientados desde la gramática descriptiva, estos diccionarios no solo atienden a los usos académicos y normativos de la lengua, sino a la lengua que REALMENTE se habla, sea correcto su uso o no; en estas obras, cuyo mejor ejemplo en castellano sigue siendo la ingente obra de doña María Moliner, tienen una entrada mucho más rápida y dinámica los neologismos y nuevos giros o construcciones que enriquecen la lengua.

DICCIONARIO IDEOLÓGICO
: Se localizan las palabras según su asociación a una idea. Se parte de ideas generales y se va concretando hasta llegar a una lista de palabras entre las que se encontrará la buscada.

No olvidemos que existe un último tipo de diccionario, el ENCICLOPÉDICO. La voluntad de los enciclopedistas, desde los ilustrados franceses del XVIII hasta los imaginarios redactores del Manual popular de los Planetas que concibió Jack Vance, ha sido siempre la misma: compendiar el saber humano, realizando una obra colectiva que reúna y divulgue datos especializados o dispersos que no podrían ser hallados con facilidad y que presenten un importante servicio su cultura. Nadie obvia los avances que proyectos como la Wikipedia han supuesto para nuestro mundo; veamos como es una entrada de la Enciclopedia que tan a menudo consultan los coetáneos de Kirth Gersen en la saga de los Príncipes Demonio:

Del Manual Popular de los Planetas, 348ª edición, 1525.

Aloysius: Sexto planeta de Vega. Constantes planetarias: diámetro, 11.200 kilómetros; día sideral, 19,8 horas; masa, 0,86; Aloysius, junto con sus planetas gemelos Bonifacius y Cuthbert, fue el primer mundo colonizado exhaustivamente por la Tierra. Por esta causa, Aloysius mantiene características de notable antigüedad; la principal consiste en que los primeros pobladores, pertenecientes a la secta de los Conservacionistas, se negaron a construir edificios que no estuvieran en armonía con el paisaje.
Los Conservacionistas han desaparecido, pero su influencia permanece. En ningún sitio pueden observarse las pretenciosas torres de cristal de Alphanor, el hormigón de Oliphane, la incontrolada confusión que reina en el sistema de Markab.
El eje de Aloysius está inclinado en un ángulo de 31,7 grados respecto al plano de la órbita; por este motivo, los cambios de estación experimentan fluctuaciones muy severas, algo atemperadas por la densa atmósfera. Hay nueve continentes. Dorgan es el más grande, y New Wexford su principal ciudad. Gracias a una moderada política de impuestos y al pragmatismo de sus leyes, New Wexford se convertido en un importante centro financiero, con una influencia que sobrepasa en mucho el ámbito de su población.
La flora y la fauna autóctonas no presentan peculiaridades notables. Debido a los intensos esfuerzos de sus primitivos colonizadores, árboles y arbustos terrestres crecen por doquier, siendo las coníferas las mejor adaptadas al entorno ecológico.

(Jack VANCE, Los príncipes Demonio, Timun Mas, 1989, página 329)




Espero que los ejemplos de estos curiosos diccionarios de mundos inexistentes hayan ilustrado la clasificación. Y si además os animo a visitar esta gran saga, aún mejor. Saludos!

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